Mundo

Sumando Bicis en Egipto

Sumando bicis es un proyecto sobre la accesibilidad y uso de la bicicleta en entornos rurales avalado por la Universidad de Buenos Aires y dirigido por Guillermo Napolitano. El 18 de diciembre de 2021 Guillermo partió rumbo a Sharm el-Sheij desde Nápoles, Italia, para cumplir su sueño de conocer Egipto, un lugar con cierto misterio, magia y parte de su camino espiritual.

¿Que representa Egipto para vos?
Desde mi punto de vista, es uno de los orígenes de las civilizaciones, de la cultura del ser humano. Europa estaba siendo un poco hostil con la variante Ómicron del Covid y por eso sentí la necesidad de alejarme un poco de allí, y encontré la oportunidad de llegar a África.

Contanos tu periplo por aquel país

Empecé el recorrido desde Sharm el-Sheij que es un destino turístico con resorts y de ahí me fui 85 km al norte, rumbo a Dahab, que fue un lugar que disfruté mucho, y tiene unas playas con corales increíbles con buen clima y mucho sol. También me sirvió para descansar un poco luego de mi paso por Europa. Luego de dos semanas salí rumbo a El Cairo, donde me quede 8 días y allí comienza mi viaje hacia el antiguo Egipto, (la mayoría del tiempo me quede en Giza, que es donde están las pirámides y empecé a estudiar sobre egiptología).

Luego fui a Luxor, un sitio muy amigable, más tranquilo, sin problemas de tráfico como El Cairo. Allí planifique el viaje a dos ruedas, aunque me habían dicho que no se puede viajar en bicicleta en Egipto.

Estando en el hostel en Luxor de casualidad encontré un chico proveniente de la India que estaba comenzando su viaje en bicicleta por África (iba desde Egipto hasta Sudáfrica). Justamente no estaba muy feliz por haber tenido que suspender su inicio de viaje por presiones de la policía que le impedía avanzar.

Todo ello me llevo a pensar el porqué de esta situación, si bien no estaba legalmente prohíbido viajar en bici, no lo permitían. La policía no quiere problemas por la gran cantidad de atentados que hubo en Egipto; por eso se me ocurrió la idea de viajar en tramos más cortos paseando como si fuera un egipcio más en vez de turista, con los mínimos elementos, lo indispensable, tratando de interactuar con la gente tratando de evitar las situaciones incomodas que hay con los controles policiales.

Así nació este viaje con la incertidumbre de si iba a poder continuarlo, esta situación me nutria de mucha energía.

Generalmente hacia viajes cortos de unas 5-6 horas, paraba a descansar y al día siguiente visitaba el templo del lugar para luego seguir viaje. Iba vestido como local y con unas cañas de azúcar lo que permitió que no me pararan en los muchísimos controles policiales que hay. No se dio esta vez la oportunidad de visitar escuelas rurales que es parte del proyecto «Sumando Bicis», por toda la situación, también por ser  algo improvisada y no llevar todos los elementos para realizarlas.

Al dejar Luxor salí rumbo a Asuán que está a 220 km, allí la primer noche tuve que dormir en un bar puesto que en el único hotel que había no querían que me hospede, sin darme razones. Luego partí a Edfu, donde me quede dos noches parando en un hotel simple, accesible y pude disfrutar del lugar que cuenta con un gran templo. El último día del viaje en bici fue en Kom Ombo, un lugar muy pequeño que no tiene hoteles, y tuve que recurrir a la policía para poder alojarme esa noche. Al día siguiente la policía me siguió todo el trayecto hasta finalizar en Asuan,

El viaje terminó allí ya que más al sur es puro desierto y sería mucho más complejo de transitar por los controles policiales. Sentí esa satisfacción de poder transmitir los beneficios de la bicicleta, tanto en la optimización de recursos económicos y el beneficio que trae a la salud. Aparte desde mi lugar trate de cambiar un poco ese sentimiento que se tiene en estos países sobre los turistas, que han contaminado muchos sitios y ha generado una separación entre el viajero y el habitante nativo. Una experiencia que no lo olvidare y a pesar de las circunstancias me dejo un gran aprendizaje.